El gerente del Consorcio de Aguas de Asturias, Julio Pérez, recibió esta mañana de manos del presidente de Cruz Roja Española en Asturias, José María Lana, el áccesit de los Premios Cruz Roja de Tecnología Humanitaria concedido al proyecto CovRed de detección temprana del Covid-19 en aguas residuales.
Este proyecto de I+D+i está promovido por Cadasa, la Universidad de Oviedo, la Empresa Municipal de Aguas de Gijón y MagnaDea.
Estos galardones distinguen las mejores ideas, prototipos o soluciones completamente operativas que destacan por su carácter creativo e innovador en la aplicación de las nuevas tecnologías, en beneficio de acciones humanitarias y de colectivos desfavorecidos. El objetivo del proyecto es desarrollar un sistema robotizado de detección automática y alerta temprana, con transmisión de datos en tiempo real, del SARS-CoV-2,instalado en redes de saneamiento, que localiza el origen del brote hasta 16 días antes de la aparición de pacientes con síntomas.
La principal innovación de este proyecto de investigación es que se está desarrollando el prototipo de un sistema totalmente automatizado (con robots y brazos robóticos encargados de realizar todas las etapas) para muestrear aguas residuales desde cualquier red de saneamiento, proceder a la concentración de las posibles partículas virales de SARS-Cov-2 existentes en ellas, extraer el genoma RNA viral con alta pureza (sin la presencia de los inhibidores de PCR, normalmente presentes en muestras ambientales), preparar las diferentes reacciones de cuantificación del virus por qRT-PCR, poner en marcha las mismas en el equipo termociclador (sin asistencia humana) y elaborar los datos, de forma que ante posibles detecciones positivas del virus en una o varias muestras, éstas se puedan comparar con las cuantificaciones previas, determinando si se está produciendo un nuevo brote local de COVID-19 y adscribirlo a una zona geográfica concreta, según la estación de muestreo de aguas residuales de donde haya procedido esa muestra. Podría adaptarse para identificar otros virus y bacterias.
Este sistema automatizado (incluyendo la interpretación y elaboración de los datos, así como su transmisión) de cuantificación de SARS-Cov-2 en aguas residuales será muy útil a la hora de poder anticipar en varias semanas la presencia de un nuevo rebrote dela enfermedad, ya que el virus es excretado por heces y orina en cantidades altas en las personas infectadas (incluyendo en las asintomáticas. sin síntomas respiratorios de ningún tipo), llegando a las aguas residuales, donde el virus queda inactivado, pero su genoma está presente para ser utilizado en la cuantificación por qRT-PCR.